Hablamos con Eduardo y Adrián, los dos primeros corredores que han conseguido una inscripción a las primeras carreras que se celebrarán tras el cambio legislativo.

Probablemente no serán los primeros en cruzar la meta. No, no son los más rápidos del panorama. Pero frente al teclado, no les gana nadie a la hora de entrar en las webs de inscripciones.
Eduardo y Adrián han sido los primeros en inscribirse a las próximas carreras ‘masivas’ (1.000 personas) en asfalto que tendrán lugar tras el cambio legislativo.
Adrián Rodríguez (32 años) se preparó para la apertura de inscripciones de #ValènciaCorre (9 de mayo) como uno se prepara para una carrera.
Él y sus amigos se pusieron una alarma para recordar el momento de la apertura de inscripciones, tarjeta de crédito en la mano y Sportmaniacs cargado en el ordenador. Y ¡zas! el primero.

«Sabía que se iba a llenar enseguida -nos cuenta- y vamos cuatro amigos juntos a correr, con lo que estábamos intentando coger los cuatro. Yo lo conseguí, pero luego volví a entrar para inscribir a mi novia y me costó. Hay muchas ganas y la gente quería pillar dorsal».
Adrián es un clásico de las carreras, «me gasto mucho dinero en dorsales -asegura-. Corro casi todo, la 10K, 15K, el Circuito de València, he corrido tres maratones… tenía muchas ganas de que volvieran las carreras para volver a tener motivación. Si no hay objetivos se te quitan un poco las ganas».
Además, Adrián ha aprovechado la pandemia para enganchar a su novia, que este domingo debutará. «Me hace ilusión, correremos juntos y quiero que vea el ambiente. Estaba algo nerviosa por si se quedaba sin dorsal». Aunque la carrera tenga un estricto protocolo sanitario, solo el hecho de ponerse un dorsal de nuevo habrá valido la pena.
Eduardo, al 10K de Beniparrell
Eduardo Aznar es un miembro dels Trivoltors de Alcàsser que tampoco deja pasar una. Ha elegido el 10K de Beniparrell que, aunque se celebre en junio, fue la primera prueba que abrió inscripciones con las nuevas normas de 1.000 participantes a través de Cronorunner.
«Sabía que las inscripciones del 10K de Beniparrell se abrían a las siete de la tarde y estaba trabajando en el ordenador. Cuando faltaban dos o tres minutos me metí y a las siete en punto mismo me inscribí».
También él es de los que echaba de menos tener un objetivo, de hecho, se ha marcado como meta «intentar batir mi marca personal en 10K. Quiero bajar de 40 minutos». Ahí queda eso.
En su club han organizado diversos entrenamientos y retos estos meses para mantener el gusanillo. «He conseguido mantenerme ocupado y motivado».
Ahora toca ir convirtiendo todas esas ganas en realidad. Estas primeras carreras darán la oportunidad a 1.000 personas cada una, pero pronto llegarán más, así que ¡id calentando las piernas y la tarjeta de crédito!
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